Cae el sueño a golpes de calor
sin el batir de un ventilador roto
no es un drama el insomnio
ni merece un solo poema
es una rabia cansada de luz, de ver,
de dar vueltas en ojos abiertos
que acaba en palabras desquiciadas
que esconden algún recuerdo
cuando no queda lugar para los sueños
la cama se niega a soportar tu pena y
te lanzas al suelo con la dejadez
de una toalla vieja sobre una playa desierta
cualquier noche de cualquier verano
que quiere ser cualquier invierno
bajo este techo azul que se quiere desplomar
de bochorno impertinente
que quiere ser frío o simplemente ser
Despiertas, abres los ojos,
ResponderEliminarlloras agradecido,
y vives un sueño vivo,
ensoñación vívida: fulgor acontecido.
Sueñas nuevamente
con no ser tú mismo,
con vagar eternamente;
con robarle a la vida suspiros...
Suspiros vacuos,
mas que antaño fueran tuyos.
Aquí te plantas en arena
sobre un desierto gris
viejo como tu alma,
descubriendo un mar añil.
Tu respiración abriendo vedas
a la caza del salitre
en navíos de trece velas,
al sabor del dolor acuoso
que tus ojos sangran sin carmín
de esa vida pulcra tuya
que se abre nuevamente a ti.